El jengibre tiene unas propiedades y beneficios muy interesantes para nuestra salud. A mi me encanta, lo utilizo muy a menudo en ensaladas, tostadas, e incluso guisos. También en un preparado que me aumenta las defensas mejor que cualquier otra cosa,,,,..pero eso lo dejaré para otro día.
Veamos qué es primero: Su nombre en latín es Zingiber officinale, y es una planta de la familia de las zingiberáceas. Su raíz es muy útil en gastronomía por su aroma, su curioso sabor y sus aplicaciones terapéuticas. La planta puede llegar a tener unos 90 cm con hojas de hasta 20 centímetros. Se caracteriza por su aroma y sabor fuerte algo picante. Mucha gente lo identifica con «sabor a colonia«.
Prepararlo es muy fácil, tenemos que quitarle la piel externa y como está muy adherida hay que hacerlo como si estuviésemos pelando una manzana o una patata, usando un cuchillo, pero ojo, sólo la parte que vayamos a utilizar. Normalmente no se utiliza demasiada cantidad, una rodaja o dos con el grosor de un dedo es suficiente. Yo a veces lo rallo para comerlo crudo sobre una tostada con queso, con aceite de oliva, o con humus, o lo que más os guste.
Lo cierto es que el jengibre se utiliza desde hace tiempos inmemoriales en la cultura asiática, no sólo como alimento o para dar sabor, sino por sus cualidades terapéuticas y preventivas. Aquí os dejo algunas de sus más conocidas:
- Es espectorante, ayuda a reducir la cantidad de mucosidad y flemas.
- Es antibacteriano y antioxidante.
- Aumenta las defensas
- Disminuye la sensación de náuseas.
- Produce cierto efecto relajante gracias al cineol.
- Regula la circulación sanguínea por su alto contenido en magnesio y zinc.
- Acelera la digestión y mejora la absorción de nutrientes.
- Combate las migrañas.
En personas sanas no suele tener ningún tipo de contraindicación, salvo si se realiza una ingesta masiva o si se tiene algún tipo de alergia alimentaria. Tened en cuenta que:
- Aumenta la temperatura corporal al ser pirético, por lo que no se aconseja cuando hay síntomas de fiebre.
- Si se realiza una ingesta desproporcionada puede producir gastritis, úlceras, colon irritable y colitis.
Y muy importante: consultar siempre al médico si se está bajo un tratamiento, sobre todo de hipertensión, diabetes o patologías cardíacas!!.
Ya me contaréis!!