Fueron varias las ocasiones que los osos polares fueron reflejados para enviar un mensaje y para proteger las especies en peligro de extinción.
En ésta ocasión sirvió para que en Brno, República Checa, Paula –como se denomina a este oso polar–se sume a la campaña para salvar al Ártico. Paula no es más que una mascota artificial con dos operadores que la movilizan.
La foto es de Greenpeace, enhorabuena!.